Los rojos del ávila fueron duramente castigados en suelo charrúa el día de ayer por la ronda previa de la Copa Santander Libertadores, con marcador de 4-0 ante el Peñarol las posibilidades son bastante complicadas para poder acceder en la fase de grupos.
Se puede decir que el penal que Fabian Carini le detuvo al capitán del Caracas, Edgar Jiménez, fue el punto de quiebre, desde ese momento los caraqueños cayeron en el fútbol que estaban desplegando y fue aprovechado por el equipo uruguayo que terminó dando una cachetada a la oncena capitalina y dejando casi definida la serie.
Ahora los de Bencómo deberán revertir esto en la ciudad de Caracas en partido programado para el 2 de febrero en el estadio de la ciudad universitaria.
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